Lo que dicen cuando callan, de Alejandra Laurencich


Alejandra Laurencich es directora de la revista La balandra. Otra narrativa, autora de la novela Vete de mí (2009) y de dos libros de cuentos reunidos en este volumen –Coronadas de gloria (2002) e Historia de mujeres oscuras (2007)- que además incluye los relatos inéditos pertenecientes a Lo que dicen cuando callan. Si bien su última publicación nuclea el trabajo realizado durante más de diez años, eso no impide que sea posible reconocer cierta unidad, tanto en el estilo como en la temática.

Una pluralidad de universos femeninos son narrados en los cuentos que reúne este volumen. A modo de instantáneas que se adentran en la cotidianeidad de las protagonistas, los relatos son la punta del iceberg que podemos intuir, pero que queda oculto en un silencio capaz de connotar más que las palabras. 

La estructura de sus cuentos mantiene un formato clásico, el conflicto organiza el relato que en general tiene una breve introducción y un desenlace. Lo interesante es que en este caso, lo tradicional no es sinónimo de conservador. Lejos de ello, predomina una mirada que subvierte los cánones sociales, y que rompe con lo políticamente correcto

Así, las protagonistas oscilan entre la realidad y el deseo, pues en el medio algo se interpone. La tensión es un principio creador, como por ejemplo en “Felicidad”, la muerte de la niña peladita que aullaba toda la noche en el hospital donde está internado su hijo, puede generar cierta satisfacción: “A partir de hoy mi bebé va a poder dormir tranquilo. Me apuro por el pasillo y siento algo extraño en el pecho. Tengo ganas de cantar.”


O en “Lo que ha comenzado” una madre que recién tuvo su hijo experimenta el absurdo de la existencia y “lo alzó y lo apretó contra su pecho. Sintió la ternura de sus huesitos acomodándose a ella, la boca contra su piel. La tibieza. Cómo pude hacerte esto. Apretó y apretó y en un momento supo que podría seguir hasta que no hubiera más movimiento, hasta hacerlo desaparecer.” Con todo, son relatos provocadores, que a veces funcionan como espejos en los que nos reconocemos de manera perturbadora e inquietante.

Al igual que otras narrativas contemporáneas, los cuentos de Alejandra Laurencich se adaptan a un lector que lee de a ratos, en el transporte público, en el tiempo libre entre las actividades. En ese sentido, es una literatura que no ofrece resistencia pero no por ello pierde la calidad de las obras que nos movilizan, nos cuestionan y por sobre todo, hacen de la lectura un acto placentero. 

Por Carmela Marrero Castro. 
Autora: Alejandra Laurencich.
Editorial: Alfaguara
País: Argentina, Buenos Aires
Año: 2013

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