El doloroso encanto de crecer
Por Marilyn Botta

En las vísperas de los carnavales de 1958, el día del eclipse, cuatro amigos de 10 años juegan en la vereda. Hablan sobre cuestiones que a esa edad resultan trascendentales: las competencias y rivalidades, la burla y la mirada ajena, el despertar de la sexualidad, el primer sentimiento de amor, las dudas y frustraciones, todo esto expresado con relatos que contienen ingenuidad, humor y que acrecientan nuestro imaginario. Rubén, el protagonista, encuentra refugio a esta difícil edad sintiéndose Misterix, un súper-héroe de la época, de esa manera logra exteriorizar todos los impulsos que reprime en la vida real. Misterix le permite a Rubén asumir sus sueños, ahí donde es lindo, alto, fuerte, las mujeres mueren por él, es el rey del baile, y no necesita sus incómodos anteojos. En las aventuras, es acompañado por su grupo de amigos que forman parte de sus fantasías encarnando a los personajes del comic. En la puesta de Lombardo, la acción se ve dividida en cuatro tiempos: el de la vereda, el de la de la siesta en la terraza, la noche del baile de carnaval y el tiempo de la fantasía donde Misterix cobra vida, y donde a diferencia de la realidad Rubén siempre termina bien parado. Un texto deleitable que es enriquecido por las actuaciones de Talo Silveyra, Tamara Garzón, Inés Palombo y Esteban Coletti, que se entregan para contar esta historia sencilla pero colmada de emoción y diversión.

Ficha técnico artística:
Elenco: Talo Silveyra, Tamara Garzón, Inés Palombo y Esteban Coletti.
Música: Mariano Cossa
Escenografía y vestuario: Mery Vidal y Lucio Tirao
Diseño de sexo, violencia y fantasía: Federico Howard
Iluminación: Jorge Merzari
Diseño gráfico Martín Guerrero
Fotografías: Mauro Franceschetti.
Producción ejecutiva: Pablo Silva
Prensa: Simkin & Franco
Asistente de dirección: Vicky Lagos
Dirección: Virginia Lombardo
Funciones:
Viernes 23:30hs
El Tinglado: Mario Bravo 948
Informes: 4863-1188
Entradas: $50