Por Jimena Repetto
Dicen que hay amores que matan y, si bien es extraño que se llegue a tanta tragedia, al menos es cierto que pasar…pasa. Amor a tiros de Bernardo Cappa es una obra inteligente. Y la inteligencia, si bien hay mucha y en distintos órdenes, aquí se basa en presentar una idea simple y desarrollarla en su máximo potencial. Vamos a presenciar una obra un domingo…no es un detalle menor que la obra se dé un domingo. Tal vez, haciendo gala de un desparpajo crítico, se podría decir que una salida ideal para el domingo de cualquiera por su gracia y dinamismo.
Tres policías, en un depósito muy pequeño, hacinados para un operativo, se ven obligados, por fuerza mayor o menor, a verse cara a cara, cuerpo a cuerpo y, de este modo, revisar sus prontuarios sentimentales. La corrupción en la fuerza pública, los intereses cruzados y la ineptitud profesional son ejes tratados en cada detalle de la construcción de los personajes, interpretados por actores que se destacan hasta en el más mínimo gesto. Nos separan pocos centímetros del escenario y la iluminación destaca el más sutil movimiento de cejas. Las penas de amor de cada uno de ellos hace que se “vigilen” y botoneen, como si se pudieran controlar los sentimientos cual ordenanzas municipales.
Por momentos la obra parece una sátira tercermundista de las series de SONY en las que policías e investigadores dejan colar sus sentimientos en cada operativo. Por otros, se dejan entrever los condimentos saturados de las novelas de la tarde. En todo caso, la combinación es perfecta y vale la pena recluirse frente al escenario mientras la sargento Valentini, el cabo Ordóñez y la agente Gallo se aman y se odian en iguales proporciones.
Dramaturgista: Laura Nevole
Tres policías, en un depósito muy pequeño, hacinados para un operativo, se ven obligados, por fuerza mayor o menor, a verse cara a cara, cuerpo a cuerpo y, de este modo, revisar sus prontuarios sentimentales. La corrupción en la fuerza pública, los intereses cruzados y la ineptitud profesional son ejes tratados en cada detalle de la construcción de los personajes, interpretados por actores que se destacan hasta en el más mínimo gesto. Nos separan pocos centímetros del escenario y la iluminación destaca el más sutil movimiento de cejas. Las penas de amor de cada uno de ellos hace que se “vigilen” y botoneen, como si se pudieran controlar los sentimientos cual ordenanzas municipales.
Por momentos la obra parece una sátira tercermundista de las series de SONY en las que policías e investigadores dejan colar sus sentimientos en cada operativo. Por otros, se dejan entrever los condimentos saturados de las novelas de la tarde. En todo caso, la combinación es perfecta y vale la pena recluirse frente al escenario mientras la sargento Valentini, el cabo Ordóñez y la agente Gallo se aman y se odian en iguales proporciones.
Dramaturgista: Laura Nevole
Asistencia: Maia Lancioni
Dirección: Bernardo Cappa
Escenografía: Norberto Laino
Vestuario: Paola DelgadoLuces: Claudio Del Bianco
Producción ejecutiva: Yanina Leandra
Producción general: Roberto Malkassian
Funciones: Sábados a las 21 / Domingos a las 19
Localidades: $ 30.-
El Camarín de las Musas – Mario Bravo 960 – 4862-0655
Prensa: Walter Duche – Alejandro Zárate – 4522-2562 / 15-5808-1039
http://ar.mc521.mail.yahoo.com/mc/compose?to=prensa@duchezarate.com.ar / http://www.duchezarate.com.ar/
Producción ejecutiva: Yanina Leandra
Producción general: Roberto Malkassian
Funciones: Sábados a las 21 / Domingos a las 19
Localidades: $ 30.-
El Camarín de las Musas – Mario Bravo 960 – 4862-0655
Prensa: Walter Duche – Alejandro Zárate – 4522-2562 / 15-5808-1039
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