Que se llame Rosa, de Luci Porchietto


La pena dura lo que vale. Cansada ya de hacer la puta

Por Perez Artaso Ariana

“La niña es un monstruo, casi: no enloquece. Antes se redime, convirtiéndose en bestia. Enfurece. Envilece. Maldice. La niña sangra todas las ganas del verano en el otoño incipiente. Ni una lágrima diluyó su sangre. Los labios rojos, nunca rosados. (…) la niña está harta, emputecida la niña, aniñada la puta. Puta infanticida. Niña filicida.”

Jugando con las palabras, encadenándolas, rimándolas y desarmándolas. Así construyó Lucy Porchietto su Que se llame Rosa (El fin de la noche, 2010), con higueras, siestas estivales y vedettes enflaquecidas devenidas en actrices.

Mediante un uso casi gimnástico de la lengua, la primera novela publicada de Porchietto salpica una historia detrás de las formas.

Entre poesía y narrativa, tías tristes, padres muertos, Radiolandia, boleros y gatas castradas antes de tiempo que ya no sirven porque no saben parir, ella –la vedette, la niña- entiende que está cansada ya de hacer la puta.



La pena dura lo que vale; la gata arisca vestida a lo Jackie Kennedy, iluminada fríamente por las luces mediáticas, asocia libre, caóticamente, pensamientos que el lector podrá unir a gusto, tomando lo que pueda y desechando lo que sangre. Los dos abortos igual no cuentan. No hay de qué preocuparse detrás de las páginas.

Así, el que lea se encontrará con una protagonista fragmentada por espejos alquilados que no se parecen al cielo engomado, contando plumas que flotan sobre el aire caliente o cuelgan, azulinas, de sus brazos coreográficos. La niña devorada por la puta. La puta que aplasta a la niña. Que se llame Rosa. Las bestias siempre ganan.

Los labios rojos, o mejor rosados; a las putas es mejor mirarlas de lejos, mientras que todavía podamos creer en la belleza. Dura, sola, carente, la vedette siente la falta, desea, peca y, aún así, se anima a pensar en volver:

“Sentir que de nuevo vale la pena esta pena. La pena dura lo que vale. Los hijos mueren al final del verano, dentro de su vientre, vigilados e iluminados. Ya se parecen a su madre”.

Que se llame Rosa forma parte de la colección Mapamundi, de la editorial Fin de la noche, donde se agrupan puentes, errancias y exilios literarios. “Volverse otro”, propone Mapamundi, preguntándose qué hay más allá de la prudencia del mapa.


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Un poco sobre la autora
Luci Porchietto, explica la contratapa de Que se llame Rosa, nació en Sunchales, provincia de Santa Fe, en 1978. Estudió letras en la Facultad de Humanidades y Arte de Rosario. Colaboró para diversas revistas de crítica literaria y durante algunos años también se desempeñó como docente. Desde 2005 vive en Buenos Aires, donde trabaja como guionista de ficción, documentales y reality shows. Escribió Que se llame Rosa, su primera novela publicada, en el año 2001, y siguió corrigiéndola hasta la actualidad.

Detalle
Título: Que se llame Rosa.
Autor: Luci Porchietto.
Páginas: 72.
ISBN: 9789871491223
Formato: 13x20
Editorial: Fin de la Noche.

Dirección:

jimenarepetto@gmail.com

Ariana Pérez Artaso
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